viernes, 30 de noviembre de 2007

hace tiempo que naufrago en ninguna orilla. no sé cuánto. tiempo.
dos días o tres años. hay cosas que hacen que el contador vuelva a cero.
yo dudo pero vivo. aunque dé mil vueltas sobre lo mismo, o ni lo piense, pasa.
reconstruir un instante es vivirlo de nuevo.
escribirlo es verlo de afuera.
y se disfruta otra vez, como una película que se ve dos veces.
ya se sabe qué va a pasar y sin embargo la pantalla ilumina nuestro rostro espectante.
esperando que esta vez no se vaya, que esta vez la historia termine distinta. pero es igual. siempre...
el pasado se hace presente a cada instante.
y el presente está viniendo o se está yendo.
y entonces acá, qué queda.
todo cambia velozmente.
sobre todo yo.
que doy un paso y me pierdo. doy otro y me encuentro.
pero distinta.
palabras, momentos, miradas me cambian a cada instante.
da vértigo; genera una sensación nueva, fascinante y frágil.
quiero un mundo en el que quepan todos mis mundos.
chau, me voy a construir.

N. dice: "A pesar de todo, es decir, antes y después de todo, hasta la primera luz del alba, soy tu amigo"

Cómo no perdornarte, amigo.

Si la única falta es extrañarnos.